Buscando en el lugar equivocado

“En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres” (Juan 1:4). Una señora buscaba sus llaves en su cartera. Primero lo hacía en forma casual, luego en forma más seria y, por último, con desesperación. ¿Sabe lo que descubrió? ¡Que estaba buscando en la cartera equivocada! No sé mucho acerca de ti, pero sí sé que te gustaría tener una vida plena, significativa y completa, ¿verdad? Lo mismo siente la mayoría de las personas. Pero no importa cuánto busques y aunque te desesperes, no lo vas a encontrar si no buscas en el lugar correcto, en Jesucristo. Ahora, no te hablo simplemente de tener vida, o sea de respirar y del palpitar de tu corazón. Me refiero a una vida abundante por la cual Cristo murió, para dártela. Vida en Cristo. Sólo Cristo puede darte verdadera vida. Ya es tiempo de que pongas tus ojos en Cristo, y mires su maravilloso rostro. Si posees un himnario, busca el himno “Pon tus ojos en Cristo”, y adórele.